De vuelta (de nada) y Heridas de Mar Cuadra Bentaieb
Después del parón de verano, volvemos poco a poco a tomar el ritmo de publicación de (al menos) un poema al mes. Gracias por estar ahí! <3
Volvemos! <3
Nunca lo quise así pero el parón de verano de este log se ha convertido en tradición, han pasado ya unos cuantos meses desde que publiqué aquí por última vez. L@s que siguen las publicaciones saben que en febrero nos nació un hijo, Thor Anders, repleto de luz y de alegría para repartir. En este tiempo me he dado cuenta de que poco tengo que enseñarle, de que que no quiero que se acabe convirtiendo en mi, sino de que me gustaría más y más parecerme a él, un ser sencillo, risueño, curioso, luminoso y lleno de vida, que no se deja afectar por el tremendo peso de ese sistema opresor al que los «rastafarians» llaman Babylonia. En estos meses han pasado muchísimas cosas, una de las más reseñables ha sido la ayuda económica que conseguí enviar a una familia que vive en Siria. Después de que me contactaran por las redes y consiguiera confirmar que no era un timo, me dispuse a organizar una colecta para ayudarles a recaudar el dinero necesario para escapar de aquél infierno. A la vista de la escasa participación de la colecta la reconvertí en una lotería hasta que conseguí alcanzar esos 2.000 € que necesitaban, 500€ por miembro de la familia. La odisea para hacerles llegar el dinero es una historia para otro momento. No consiguieron salir de Siria por una complicación en la enfermedad pulmonar del padre, pero ahora están tratando de generar un pequeño negocio con ese dinero que, con el tiempo, les lleve a ahorrar lo suficiente para pagar otra salida más cara pero con más probabilidades de éxito. Para mí la humanidad es sobre ayudarnos l@s un@s a l@s otr@s, para mí las nacionalidades nos limitan en la necesidad, cada vez más imperiosa, de unirnos como raza por unos objetivos comunes y positivos para la naturaleza. Veo todos los días como miles de euros son gastados en comida que no alimenta, en alcohol que contamina, en máquinas tragaperras que generan adicción… y cuando preguntas de qué sirve todo eso la respuesta universal es que «para generar puestos de empleo», y yo me pregunto que pasaría si todo ese dinero se gastara en solidaridad, quizás se generarían puestos de empleo en aquellas empresas y organizaciones que se dediquen a ayudar a otras personas, otros animales y al resto de la naturaleza. Pero ya sabes, una expresa esas opiniones y le llaman soñadora… triste realidad. Pensamos solo en cumplir nuestros pequeños deseos, porque nos lo merecemos, porque trabajamos duro y es nuestro dinero, que en cubrir las necesidad de las demás personas.Heridas, de Mar Cuadra Bentaieb
Y si embargo, a pesar de tener muchos poemas escritos a los que quiero ir dando salida y mostrando en público, en este regreso quiero dar espacio a la voz poética de Mar, persona valiente, sensible y luchadora que conocí en la (corta) época que viví en Mahón, Menorca. Desde que dejé la isla ella ha sido la encargada, en mayor medida, de seguir adelante con esta relación con frecuentes mensajes en las redes sociales que siempre encabeza con las palabras «querido poeta» y a los que da continuidad con profundas palabras llenas de belleza que brotan de su corazón tan puro. Le estoy tan agradecida de su tenacidad al seguir comunicándose con este alma que tan cálida puede ser en la distancia corta y a la que tanto le enfrían las distancias… Este poema, Heridas, me lo envió hace poco más de dos semanas, el viernes 21 de septiembre, pocas horas antes de recitarlo ante un público en Sa Sínia, que según he podido descubrir gracias a las redes, es un precioso espacio de arte en Menorca. Y como el tono del mismo está íntimamente ligado a las reflexiones que comparto en los párrafos anteriores, he querido abrirle la puerta al público de este blog, que no sé ni si existe la verdad, pero que espero que esté ahí. Poco más por mi parte que dejaros con Heridas de Mar Cuadra Bentaieb.Heridas
Las heridas del mundo, ya no cicatrizarán, de seguir así, ni siquiera éste, existirá, Guerras que no acaban nunca, porque son estables. Dioses variados, a los que encomendar tu vida, drogas que ayudan a evadirse, con o sin receta. La Edad Media Moderna, hogares llenos de almas ausentes, pantallas que absorben nuestro tiempo, Ayyyyyy, el tiempo, ingrediente estrella de nuestro plato diario, Tachando como un preso en su calendario, el tiempo que le queda, tiempo que se me escapa Aunque me tenga. Ni tiempo tengo de pensarlo. Recordar me duele, tanto, como las heridas del mundo de la evolución de la especie, a la involución, en tiempo récord Todos somos productos y consumidores a la vez El pensamiento deja de ser importante, la cultura molesta, y las artes sobran. Pienso, consumo, luego…existo La humanidad pierde su cualidad humana Las máquinas toman el control y las mentes sumisas, caen como moscas. Pan y circo, como en Roma, ocio y consumo Llega el otoño, vuelta al cole, el bullying Semillas del futuro alienadas y contaminadas por el sistema, la ignorancia, el puto estado..de bienestar y las mentiras eternas que se alimentan y protegen Y NOS QUEDAMOS SIN VOZ, CUANDO YA, NOS ROBARON EL ALMA.
Recordar me duele, tanto, como las heridas del mundo de la evolución de la especie, a la involución, en tiempo récordBrutal poema, comienza un poco dubitativo quizás, pero en seguida entra al trapo de la conciencia profunda con una lírica contundente y sencilla, casi como una canción de hip hop, con ritmo fluido y constante que nos lleva por lugares que, por obvios, todo el mundo debería ver pero que, por lo que parece, solo «unos pocos» observan. Pero cada vez somos más los que le vemos las grietas al sistema y las transmitimos de manera sencilla para que todo el mundo pueda observarlas con nosotr@s. Mar, a parte de escribir poemas, se dedica a desarrollar su alma de muchísimas otras maneras, por ejemplo fotografía o collage, aquí abajo os dejo una pequeña galería que expresa su visión con humildad. Gracias Mar por compartir tus fantásticas creaciones. Luz y amor para ti.